Tal vez, sólo tal vez, sea momento de acomodar todas las piezas de este rompecabezas eterno...
De contar las partes, a ver si están todas...
Seguro que falta una...
Porque ya intentamos armarlo cien veces y otras tantas nos quedamos sin poder...
Es tan frustrante...querer, saber que el otro quiere y no poder, que no podamos...
Es curioso como uno se acostumbra al ciclo interminable de la ilusión, la alegría, el desencanto y la tristeza...
Y arranca de nuevo sin dudarlo ni un poco...
En el camino vas dejando caer, como al descuido, señales para no perderte del todo...para que tal vez, sólo tal vez, un día te encuentres con la pieza que te falta.
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